Hace unos días decidí dejar de contar.
La información que tengo ya es suficiente y, como siempre, puedo decidir escuchar a mi cabeza o a mi ombligo. Esta vez voy a escuchar a mi ombligo. Simbólicamente, este será el principio.
He vivido pensando y contando. Tanto ha sido el ruido que no he podido escuchar.
Esta vez decidí dejar de contar:
números
años
tiempo
personas
experiencias
trancas
aprendizajes
Esta vez... voy a escuchar:
Solo lo justo y necesario
Esta vez... voy a sentir...
Todo a su tiempo. Sin contar cuánto se demora.
Todo a full. Olvidando las trancas.
Hoy dejé de contar. Decidí escuchar y sentir.